Por lo que respecta a esta breve reflexión sólo invito a pensar en lo siguiente:
A casi todos nos ha conmovido una historia romántica: sea leer un libro o ver una película. Estas cosas nos hablan del amor como lo explica Erich From(El Arte de Amar), se refieren al tema, como si amar fuera un problema del objeto y no del sujeto. Es decir, para muchos amar depende de conseguir la persona correcta, e incluso a la hora correcta, porque podríamos no estar de humor para ello.
Sin embargo Jesus nos enseña que amar está en ti, en tu capacidad para perdonar y mirar con caridad las carencias de los demás. Incluso para rogar por la salvación de aquellos que infringieron gran dolor en su cuerpo. Creo que en la tierra lo mas parecido a ese amor es el amor de los padres por sus hijos, allí hay una gran gran lección, que me atrevo a decir es lo más romántico y bíblico que conozcamos, veamos porque:
En primer lugar los padres te aman primero , para cuando tu tomas conciencia del amor, la gratitud y desarrollas capacidad para preocuparte por ellos. Para cuando eso ocurre en ti, ya los padres tienen tiempo amando te y cuidando de ti. Entonces aquí tenemos una enseñanza valiosa, Dios te amo primero, tus padres te amaron primero. Por tanto si quieres construir relaciones basada en genuinos sentimientos de amor, debemos tomar la iniciativa, no se trata de andar buscando a quien es digno de nuestro amor; sino de desarrollar nuestra capacidad de amar y dar.
Indudablemente eso fue lo que hizo Cristo, mucho antes de que nosotros lo reconociéramos como señor y salvador ya él nos había tomado como sus hijos.
No hace falta ser un fanático religioso, ni un doctor en teología para entender que en la biblia y otros textos sagrados. Está escrita la historia de amor más romantica y autentica: El amor de Dios por nosotros, la humanidad.
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